Día a día la idea que por algunos segundos nos circula en el cerebro es la del éxito, ser exitosos o que cada paso es uno hacia el éxito. La definición de esa palabra se me hace un poco difícil de tragar. La idea que tenemos del término no es más que la que los artistas de la invasión neuronal o en mejor sentido los neutro-programadores, en función menos elaborada, llamados publicistas, se han encargado de proyectar. En principio, con el surgimiento de las religiones protestantes se justificaba la idea del "éxito" económico como la salvación terrenal que Dios había propuesto a sus seguidores simpatizantes con las noventa tesis de Martín Lutero, orientándolos al fin de trabajar, ahorrar e invertir. No creo que ese sea el principio más remoto a la idea del concepto, quizá, pudiera ir más lejos en historia cuando la burguesía derrota a los señores feudales creando un nuevo régimen económico basado en estratas sociales de más a menos pudientes económicamente hablando. Para los últimos, sin más ni menos, su único recurso fue unirse a la mano de obra laboral para subsistir por el mínimo salario trabajando al máximo en la interminable cadena de producción. Con estos dos ejemplos anteriores creo que exageré al remontarme en la historia ya que algunos pensarán que es el régimen vigente y que no hace falta abundar tanto en él para darse cuenta que la historia se repite hasta la "post-modernidad".
Lo que me causa peculiar curiosidad es como se han explotado los recursos de la psicología, publicidad y medios de comunicación para tergiversar el concepto (éxito). Una de las estrategias que más me ha llamado la atención en este arte de la tergiversación y resta de significado a tan acaparante palabra lo es la publicación del libro" El Secreto" (y por si fuera poco el largometraje también). Dicho libro (y mucho más el video) habla de la "Ley de atracción" como un mero instrumento para satisfacer nuestras necesidades del ego materializado y cómo orientarla a nuestra conveniencia. La venta de éste libro me parece un insulto a la inteligencia, no por el planteamiento de la ley de atracción, pues compone un lugar importante en la ciencia, sino, por su claro afán de fomentar el consumo y lograr el consumo en sus ventas. Otra gran deferencia que tengo (en cuanto a la tergiversación del concepto "éxito") toma lugar con las compañías dedicadas a ofrecer productos o bienes a domicilio. La idea que implantan a sus vendedores es la del "éxito" Pero… ¿Qué éxito? El éxito económico disfrazado de superación personal y no se me ocurre otro termino posible para esa vacante de empleo que no sea "Victimas de las redes de mercadeo". Dichas víctimas son condicionadas a asistir a "cultos" de alabanza a su producto de venta semanalmente y impulsados a reclutar más "Victimas de redes de mercadeo" que quieran ser "exitosos".
La realidad del concepto se ha reducido, quizá, su aplicación sea contextual, pero la predominante es la del éxito económico. El éxito real se logra a través del distanciamiento del afán material, del afán lucrativo ya que promueve una constante competencia hasta con el propio individuo lo cual lo convierte en otro instrumento más que se encierra en el cerco de la construcción social.Creo que E.Kant dio en el clavo cuando definió su filosofía idealista planteando que la percepción del mundo externo por vía de la sensibilidad la consideramos como la realidad última. El éxito contaminado por los afanes del "yo" nos plantean el término doblegado a la materialidad como la realidad última construida por los procesos internos de la mente forrada de publicidad de mierda. Al contrario se debería pensar ¿Que es en esencia el éxito? ¿En donde reside su significación subjetiva? ¿Soy exitoso en realidad o estoy en constante negación a la "realidad"? La respuesta a estas preguntas residirá en nuestro rol social, pero solo saliendo de ese rol es en dónde en realidad estará la respuesta, en un solo paso al éxito.
P.D Al inicio de la escritura pensé que sería un poco generalista hacer hincapié en la contextualidad del término al aspecto meramente economico del éxito como concepto. Pero, no es hasta que escribo "éxito" en la barra de búsqueda para asignar una imágen al texto que confirmo que la idea más proliferante del "éxito" es su reducción al aspecto económico social. !Haz la preuba!
¡Gracias mi gente!
Por: Elvin Mitchell Toro (Queseyo)
P.D Al inicio de la escritura pensé que sería un poco generalista hacer hincapié en la contextualidad del término al aspecto meramente economico del éxito como concepto. Pero, no es hasta que escribo "éxito" en la barra de búsqueda para asignar una imágen al texto que confirmo que la idea más proliferante del "éxito" es su reducción al aspecto económico social. !Haz la preuba!
¡Gracias mi gente!
Por: Elvin Mitchell Toro (Queseyo)